“Los auditores aportamos nuestro granito de arena al éxito empresarial gallego”
 
15.07.2021. El auditor y socio emérito de Deloitte Jaime del Olmo valora la relevancia del trabajo de los profesionales gallegos de auditoría en la buena trayectoria de muchas de las empresas de Galicia. “Los auditores aportamos nuestro granito de arena al éxito empresarial gallego, divulgando y transmitiendo nuestro conocimiento en el ámbito de la contabilidad, el control interno y las finanzas y promoviendo la idea de que la transparencia y el rigor en la información financiera es un pilar básico en la gobernanza de las empresas”, explica Del Olmo. El experto auditor acaba de presentar en Vigo el libro La reforma del Plan General de Contabilidad (PGC) 2021, del que es coautor junto con Francisco López-Corrales y Mercedes Mareque. Del Olmo considera que el nuevo PGC no termina de completar la armonización de las normas..
 
¿Qué supone para los auditores la reforma del Plan General de Contabilidad y cómo la valora?
Es un cambio más al que hemos de adaptarnos. Con la Ley 16/2007, de reforma y adaptación de la legislación mercantil en materia contable, se inició una estrategia de convergencia del Derecho contable español con las NIIF-UE. La finalidad era que las empresas españolas pudieran formular sus cuentas anuales individuales con un marco de información financiera propio, pero adaptado a los principios y criterios contables internacionales y, al mismo tiempo, lograr que transitasen hacia la aplicación de una normativa contable, inspirada en los principios y criterios aprobados por la Unión Europea para los grupos cotizados.
 
La reforma del Plan General de Contabilidad publicada el pasado mes de enero a través del RD 1/2021 se enmarca en esta estrategia de convergencia, si bien la armonización no es completa, ya que las normas que se han modificado: la NRV 9ª y NRV 14ª presentan algunas diferencias con sus equivalentes internacionales. Además, la reforma ha dejado al margen la relativa a arrendamientos, cuyo tratamiento contable presenta divergencias significativas entre ambas regulaciones. Sin olvidarnos de otros criterios que tampoco han sido homogeneizados en las sucesivas reformas del Plan General de Contabilidad, como el de la amortización del Fondo de Comercio, que sí se aplica bajo el Plan, pero no según la NIIF-UE.
 
¿Cómo influirá esta reforma en las cuentas de 2021? 
Supondrá un esfuerzo relevante, tanto para los responsables de preparar la información financiera como para los auditores, ya que las nuevas normas incorporan el uso frecuente de estimaciones, tanto para el reconocimiento de ingresos como para definir los valores a los que deben ser registrados los activos y pasivos financieros, y la necesidad de utilizar a menudo cálculos financieros para determinar la valoración de los mismos.
 
Por otro lado, las disposiciones transitorias exigen que algunas de las modificaciones sean aplicadas de forma retroactiva. Todos estos aspectos implican un trabajo añadido en la preparación de las cuentas anuales del 2021 y, consecuentemente, en su posterior verificación por parte de los auditores.
 
¿Cuáles son las dudas o cuestiones más comunes sobre este plan planteadas por los auditores de Galicia? 
Los cambios en las NRV 9ª y NRV 14ª son relevantes y, en algunos casos, de difícil interpretación. Además, existe un inconveniente añadido porque no logran la uniformidad al 100% con las NIIF-UE, lo que impide que podamos utilizar, para determinar su correcta aplicación, la información financiera y la experiencia práctica de todos los grupos cotizados en la UE.
 
Para los auditores, la falta de homogeneidad añade dificultad a la hora de realizar nuestras comprobaciones y verificaciones, ya que, de no existir diferencias entre ambas normativas, dispondríamos de una literatura detallada y precisa emitida por el IASB, el organismo independiente emisor de las normas internacionales, al cual podríamos acudir en caso de duda. A esto debemos añadir el inconveniente de que, actualmente, el desarrollo de nuestro Plan General de Contabilidad, en relación con las normas que han cambiado, no es ni tan extenso ni tan preciso como el de las NIIF-UE.
 
¿Qué espera de las cuentas de 2021?
El esfuerzo de los auditores en las cuentas de 2020 fue extraordinario. Por un lado, como consecuencia de los inconvenientes a la hora de realizar las verificaciones y comprobaciones en un contexto de restricciones impuestas por la pandemia; y, por otro, en relación con la complejidad añadida de tener que evaluar situaciones de incertidumbre sobre la continuidad de la actividad de las empresas, motivadas por el impacto negativo de la Covid en sus negocios.
 
En las cuentas de 2021 seguiremos arrastrando algunas de estas dificultades, además de las que puedan derivarse de la interpretación de las normas que han cambiado, así como las propias de la actividad del auditor, que en los últimos años viene estando sometida a una severa y creciente regulación.
 
¿Cómo ha cambiado la auditoría gallega desde que empezó su carrera?
La rigurosidad, la cualificación y el alto grado de exigencia que nos imponemos los auditores siempre han sido los mismos. Lo que ha cambiado considerablemente ha sido la complejidad de los negocios y operaciones de las empresas y el entorno informático en el que se desarrollan los procesos financiero-contables, que cada vez es más dominante. Y, como mencionaba, el uso de estimados en las valoraciones de muchos de los activos, pasivos e importes que se reflejan en las cuentas anuales se ha incrementado notablemente.
 
Todos estos cambios conllevan modificaciones en la regulación contable y en las normas técnicas de auditoria, lo que obliga a los auditores a estar a la altura de las circunstancias, invirtiendo continuamente en la formación de sus equipos, adaptando sus procedimientos al nuevo entorno, utilizando cada vez en mayor medida herramientas tecnológicas como el big data y data analytics y, en muchos casos, teniendo que recurrir a expertos para completar el trabajo de auditoría con el nivel de exigencia y calidad requerido.
 
¿Cómo valora la relevancia del trabajo de los auditores gallegos en las empresas que auditan?
La influencia de los auditores, a través de su trabajo en la mejora de la transparencia de la información financiera revelada por las empresas, y en la transmisión del conocimiento en aspectos contables, mercantiles y financieros, ha sido muy notable. Los consejos de administración han entendido que el principal objetivo de las cuentas anuales es el de presentar la imagen fiel del patrimonio, de la situación financiera y de los resultados de la empresa, y que este debe ser el propósito en la formulación de las cuentas. Para ello, la labor de los auditores en su comunicación con los consejos de administración, la profesionalización de estos y, más concretamente, la de los comités de auditoría, han sido determinantes.
 
En el tejido empresarial gallego existen numerosos casos de éxito en el ámbito de la internacionalización, la tecnología, el diseño o la innovación, grupos que son referentes en sus respectivos sectores y esto ha sido mérito de sus empresarios, que han sabido tomar las decisiones adecuadas y rodearse de los mejores equipos. En este proceso, los auditores también hemos aportado nuestro granito de arena al éxito empresarial gallego, divulgando y transmitiendo nuestro conocimiento en el ámbito de la contabilidad, el control interno y las finanzas y promoviendo la idea de que la transparencia y el rigor en la información financiera es un pilar básico en la gobernanza de las empresas, y que las cuentas claras son una garantía credibilidad y ausencia de conflictos frente a accionistas, financiadores y restantes grupos de interés.
 

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