NIC1: ¿cómo clasificamos los préstamos o la deuda convertible?
Las modificaciones de la NIC 1 podrían provocar un impacto significativo en la clasificación de los pasivos. Con el objetivo de fomentar la uniformidad de aplicación y aclarar los requisitos para determinar si un pasivo es corriente o no corriente, el Consejo de Normas Internacionales de Contabilidad (el IASB por sus siglas en inglés) ha modificado la NIC 11.
Como consecuencia de esta modificación, las sociedades deben revisar sus contratos de préstamos a fin de determinar si la clasificación de los mismos cambiará. Por ejemplo, la deuda convertible clasificada como ‘no corriente’ actualmente puede tener que reclasificarse como ‘corriente’, pudiendo afectar el cumplimiento de ratios de la financiación (covenants). Dados los impactos potencialmente significativos que se avecinan, las empresas deberían revisar los posibles impactos lo antes posible.
Para más información pinche aquí.